La escuela elegida fue Augusto D'Halmar, mismo establecimiento en el cual debía dictar el taller de fomento lector para padres a través del programa de Pro O"Higgins ¿Quién se puede quejar así?
Desde la directora hasta los auxiliares, todos laboran como un gran equipo, esfuerzo que se nota porque aún con más de cuarenta niños en una sala de clases, el orden y el respeto están presentes.
Fui feliz viendo los registros de las fotografías, niños sonriendo, mirándose cómplices los unos a los otros durante el cuenta cuentos interactivo, o escuchando con atención mientras les leía una historia con kamishibai.
Más tarde las mamás hicieron algo parecido, jugaron, crearon, escucharon cuentos, compartieron experiencias y se marcharon a casa con nuevas herramientas para hacer que sus hijos sientan que la lectura es entretenida y que, además, vaya que sirve para la vida ser un buen lector.
Fotos AQUÍ.
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